No sé si soy sólo yo, pero hacer tareas no es mi actividad favorita. Crecí en una familia más o menos numerosa y el método de mi mamá funcionó tan bien que mientras ella trabajaba todo el día en casa, nosotros hacíamos las tareas sin que estuvieran detrás nuestro.
Hay numerosos sitios donde te aconsejan cómo organizar los hábitos de estudio, entre estos me encontré éste de la Universidad de Illinois.
A mi entender, las tareas son un refuerzo para el aprendizaje que los estudiantes tuvieron en la escuela o colegio y responden a un tiempo extraordinario de ejercitación. Sin embargo, muchos establecimientos exageran la asignación de tareas, causando tedio y tensión.
Parte de este problema se abarca desde el inicio y tiene que ver con la investigación que debe preceder a la elección de un centro educativo y del método que utilice. Alguna vez recuerdo a mi hija con una tarea de 10 hojas para una tarde, inaudito para una niña de 4 años. Una educación rígida solapada por los padres da poder absoluto al maestro, en mi caso creo en el diálogo y eso funcionó: platicar con la maestra, plantearle mi punto de vista y acordar que haría lo conveniente en un tiempo adecuado Creo en la participación activa del padre, no como "hacedor" o "co-rresponsable" de las tareas, sino como guía principal que se interesa por la forma y el contenido que los pequeños están recibiendo.
Alrededor de las tareas en casa existe todo un debate pedagógico relativo a su poca relación con el rendimiento de los estudiantes, lo cual pueden profundizar en este enlace . En nuestro país aún no se cuestiona a profundidad la necesidad de revisión de metodologías, por lo que, al menos vale la pena investigar para formarnos opinión al respecto.
Foto: tomada de Internet
Hay numerosos sitios donde te aconsejan cómo organizar los hábitos de estudio, entre estos me encontré éste de la Universidad de Illinois.
A mi entender, las tareas son un refuerzo para el aprendizaje que los estudiantes tuvieron en la escuela o colegio y responden a un tiempo extraordinario de ejercitación. Sin embargo, muchos establecimientos exageran la asignación de tareas, causando tedio y tensión.
Parte de este problema se abarca desde el inicio y tiene que ver con la investigación que debe preceder a la elección de un centro educativo y del método que utilice. Alguna vez recuerdo a mi hija con una tarea de 10 hojas para una tarde, inaudito para una niña de 4 años. Una educación rígida solapada por los padres da poder absoluto al maestro, en mi caso creo en el diálogo y eso funcionó: platicar con la maestra, plantearle mi punto de vista y acordar que haría lo conveniente en un tiempo adecuado Creo en la participación activa del padre, no como "hacedor" o "co-rresponsable" de las tareas, sino como guía principal que se interesa por la forma y el contenido que los pequeños están recibiendo.
Alrededor de las tareas en casa existe todo un debate pedagógico relativo a su poca relación con el rendimiento de los estudiantes, lo cual pueden profundizar en este enlace . En nuestro país aún no se cuestiona a profundidad la necesidad de revisión de metodologías, por lo que, al menos vale la pena investigar para formarnos opinión al respecto.
Foto: tomada de Internet
Es increíble pero el tema me parece sumamente interesante porque creo que en lugar de reforzar el aprendizaje de los estudiantes solamente se les satura de información demotivandolos y provocando que ya no quieran estudiar, ademas el tiempo que dedican a hacer tareas extraescolares podrian utilizarlo para reforzar algunas otras aptitudes y estimular el interés en otras actividades que fortalezcan el desarrollo de los alumnos principalmente los de menos edad
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